Desde que Patricia está estudiando oposiciones y yo estoy de papi total por las tardes, no tengo tiempo para nada. Absolutamente nada. Es una nada encantadora, pero nada al fin y al cabo. Tengo que escribir un mensaje a los compis de Cavite, hablar con los antiguos alumnos de Alhaurín, mandarle unos relatos que le había prometido a Sadness (¿eso entra en el apartado de antiguos alumnos?), hablar con los jefes de Devir sobre que no tengo tiempo para traducir de momento, jugar con los juegos que me han traído los reyes, terminar de leer Imajica, que es el segundo intento y sería una vergüenza volver a dejarlo parado, preparar las clases del trimestre. Y por supuesto, dedicar algo de tiempo al blog, que lo tengo al pobre paralizado. Así que he empezado por lo más fácil :-).
J.
Sadness (¿eso entra en el apartado de antiguos alumnos?)
Entraría en el caso de que hubiésemos dejado de enseñarnos.
¿O no?
Ya sabes que estamos en Alhaurín para lo que sea, pero tómalo con tranquilidad. UN ABRAZO